Dos horas antes del crimen del playero en la ciudad de Rosario, un delincuente les gatilló con un arma a dos chicos que salían de un club de fútbol. El violento episodio quedó registrado por una cámara de seguridad.
De acuerdo a lo que se puede ver en las imágenes, ambos jóvenes estaban charlando en la entrada del club
En ese momento, el que iba de acompañantese bajó y les apuntó en el pecho y en la cabeza, pese a que ninguno se resistió. Afortunadamente, las balas no salieron.
Conmocionados, los chicos levantaron las manos y uno de ellos tiró su bicicleta en la vereda. Cuando ambos delincuentes se retiraron, corrieron hacia adentro del club.
En las imágenes también se puede observar que el dueño de la bicicleta regresó para buscarla, ya que la había dejado tirada creyendo que el ladrón se la quería robar.
Bruno Bussanich fue asesinado por sicarios el sábado, minutos antes de la medianoche, cuando se encontraba trabajando en una estación de servicio en Rosario. Entre lágrimas, su primo Santiago, entrevistado porNelson Castro, habló de la dramática situación que vive la ciudad.
El joven contó que su familiar trabajaba en la gasolinera hacía un mes y que dos días antes del asesinato lo habían pasado al turno noche. “Él no se va a levantar más de ese ataúd”
“Mataron a un pibe inocente. Hay que salir adelante, si no nos cuidamos entre los rosarinos y los argentinos no nos cuida nadie. Somos buenas personas”, dijo. El chico, además, pidió justicia para todas las víctimas de los ataques narcos.
“Yo le hice el curriculum para ingresar a la estación de servicio. Él trabajaba desde su casa como telemarketer y tuvo que salir a buscar más trabajo por la situación económica. Consiguió y lo vinieron a matar acá”, manifestó visiblemente conmovido.
Asimismo, señaló que Bruno tenía miedo por la situación violenta que se vive en la zona. “Estamos atados de manos, condicionados, tenés que pensar dos veces si salís o no. Es algo que naturalizamos, es el pan de cada día”
En medio de su desgarrador relato, expresó: “No va a estar más con nosotros. Lo vi en el ataúd, sé que no se va a levantar más. A mí no me lo devuelve nadie. A ninguno de los inocentes no los devuelve nadie. Rosario sangra”.
En el mismo sentido, contó que teme que los atacantes tomen represalias contra sus seres queridos. “Tengo miedo de lo que va a pasar de ahora en más. Hoy vuelvo a mi casa y no sé como voy a salir después. Nuestra familia está arruinada”